Seguidores :)

sábado, 17 de diciembre de 2011

Y allí estábamos, tu y yo, los dos, a solas. En aquel banco de aquel parque que nunca solíamos ir. Serían las ocho de la tarde con diecisiete minutos y cincuenta y dos segundos. Hacía frió, mucho frío. Sentados uno enfrente de otro, guardándonos nuestros deseos. Y de repente dejamos de hablar, nos miramos fijamente, nos acercamos poquito a poco y cuando nuestros labios están a punto de rozarse ..
¡RIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIING!
Maldito despertador, otra vez igual, me despertó de aquel sueño. Ese sueño que sé que solamente se quedará en eso .. un sueño.